EMT Madrid también valorará las propuestas tecnológicas e innovaciones que las empresas licitadoras presenten para aportar un valor añadido al servicio de seguridad. Entre ellas, se tendrán en cuenta soluciones de ciberseguridad aplicada a infraestructuras críticas, el uso de inteligencia artificial para detectar comportamientos anómalos, la automatización de procesos de supervisión o cualquier otro avance que incremente la eficacia, eficiencia o sostenibilidad del sistema de vigilancia.

En lo que respecta específicamente a la vigilancia con drones, la EMT analizará aspectos clave como la calidad de las imágenes captadas, la velocidad de despliegue de las aeronaves, su autonomía de vuelo y el alcance operativo del servicio. Además, se tendrá en cuenta la experiencia y perfil profesional del personal asignado al contrato, especialmente las horas de vuelo acreditadas y la formación en operaciones RPAS.

Otros criterios relevantes incluirán la oferta económica presentada, el compromiso para prestar servicios extraordinarios ante necesidades imprevistas y la estabilidad del equipo humano durante toda la ejecución del contrato, garantizando así la continuidad y calidad operativa del servicio.